Y es que después de haberse lesionado en el partido ante Veracruz de la jornada 13 del torneo anterior de la Liga de Ascenso, Álamo Cruz dejó de tener actividad, y en el presente certamen, pese a trabajar con el conjunto mayor, es recurrido por el de Segunda División para resguardar la cabaña.
“Yo estoy tranquilo, yo sé que pasó lo de la lesión en el partido contra Veracruz y estuve como mes y medio o dos meses inactivo, entonces poco a poco ahí vamos, uno está tranquilo mientras esté jugando, ya sea aquí (Segunda División) o en la de Ascenso uno va a hacer las cosas bien”, comentó el cancerbero nacido en Naucalpan, Estado de México.
Cristóbal Ortega le dio la confianza en el torneo pasado para estar en la línea de meta desde la jornada 6 hasta la 13, en la cual abandonó el partido ante Veracruz por una lesión al minuto 29.
En el presente campeonato quienes han tenido la responsabilidad de parar en el equipo mayor son Edgar Hernández y Joel Barba, por lo que Álamo ha sido ocupado por Héctor Tapia.
Con respecto al encuentro del sábado, el casaca número uno de Albinegros consideró que el conato de bronca llegó a afectar, pero lo importante fue sumar dos puntos en la tanda de penales, instancia en la cual él detuvo tres disparos.
“Fue también mérito del rival, no se vinieron a encerrar, vinieron a proponer el juego, estuvo parejo y la verdad Tecamachalco también juega bien, no es cualquier equipo”, dijo el jugador que más recibió aplausos el pasado sábado por la porra.
Rafael Álamo reconoció también que ahora la importancia radica en no dejar escapar puntos. “Tenemos que pensar en ganar de visita ante Potros UAEM y sumar de tres para que no se nos empiece a alejar la calificación”, sentenció el que por el momento ha sido el arquero titular de Orizaba en la Segunda División, pero que pronto podría volver al de la Liga de Ascenso.
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